19/02/2012

Tara en las Bermudas


Llegada a las Bermudas V.Hilaire/Tara Expeditions

Este domingo estamos llegando a las Bermudas bajo una llovizna que nos recuerda a Bretaña. Nos hemos acercado a este archipiélago de 123 islitas por el flanco occidental de la isla principal, Gran Bermuda, bordeando la costa hasta vislumbrar el canal de acceso al puerto de St George’s town, en la isla de Saint George. El equipo científico cambiará por completo en esa escala donde estaremos hasta el 23 de febrero.

Los pocos rayos de sol del inicio del día no bastan por darnos ilusiones: no estamos llegando con buen tiempo. Pero el mar está en calma, la temperatura de 20° C es suave en comparación con nuestra salida fresca de Nueva York.

A primera vista, hay bastantes construcciones en esta isla con algunas playas hermosas y pequeños bosques. Algunos pescadores a nuestro alrededor. En el fondo, casas de colores con techos blanco, un parecer un poco mediterráneo.

Entre Gran Bermuda y Saint Georges’s Island, se divisa el canal con las usuales balizas de color rojo y verde, pero al revés de lo que tenemos en Francia. Como en las Antillas francesas. A pesar del cielo gris el agua es de un color turquesa extraordinario.

Nos saludan algunos espectadores, transeúntes en la punta de la entrada sur del canal. Entramos en un canal de unos cincuenta metros de ancho. En esta laguna de forma alargada, unas casas de colores, coníferos, palmeras. Una isla tranquila.

Con Alain Giese, segundo capitán, sondeamos el pie del pontón donde queremos amarrarnos. "Estribor al muelle": Loïc Vallette, el capitán, confirma. A los pocos minutos, Tara está pegado del muelle. Un oficial de aduanas se acerca para repartir los formularios de entrada y migración que cada quien tendrá que completar.

Lento pero seguro nos estamos acercando a Lorient, el final de esta expedición. La distancia en millas se viene acortando y también la distancia horaria: desde ayer no estamos a más de cinco husos horarios de París.

Vincent Hilaire