07/10/2013

Ultima escala en el Norte canadiense

Inuits cazando el narval . F.Aurat/Tara Expeditions

Tara está anclado en Pond Inlet, Nunavut. Esta aglomeración de unas tres mil personas es la más poblada de las cuatro comunidades ubicadas al norte del paralelo 72. De mayoría Inuit, su población es una de las pocas que sigue creciendo en los últimos años. Situado en Eclipse Sound, “Pond” ofrece una vista sin comparación sobre este fiordo majestuoso.

Nuestro aterrizaje a Pond Inlet ha sido  asombros de belleza. Glaciares que se tiran al agua del Navy board Inlet, montañas nevadas con picos que rivalizan de diversidad, esculturas de icebergs, manchas ocre y marrón de la tundra ártica: Nunavut, que estamos cruzando desde hace diez días, es una maravilla.

Apenas desembarcados del anexo, presenciamos una escena salida de una era lejana para nosotros. En la loma que domina la playa, un Inuit esta rebanado carne congelada de narval para sus perros que aúllan de excitación. Es el momento del manjar. Los tres hijos de este hombre están jugando cerca, mirando también esta escena habitual para ellos. Acarician un cachorro impaciente detrás de su madre, que lo controla sin brutalidad.

Los domingos en Pond Inlet, uno  hace lonjas de narval para sus perros mientras los niños juegan. Ya son muy pocas las granjas en Francia donde, los fines de semana, se mata el cerdo en familia. La realidad aquí, es que hay que valerse por sí mismo para sobrevivir. ¿Por cuánto tiempo más? Los supermercados  están llegando, incluso en estas zonas remotas donde los bananos crecen solamente en los estantes.

Nos llama la atención la suma tranquilidad de este pueblo. Es más poblado que Tuk y Arctic Bay, pero su única calle hace que los encuentros espontáneos sean limitados. Cuando se dan, son cálidos, a pesar del frío que disuadiría hasta un caribú!

Un aeródromo, un gran supermercado, una cooperativa, un centro cultural, un hotel Pond Inlet, ya se está desarrollando aquí un destino turístico. Parce ser la ley del genero para seguir viviendo aquí. Se abandonaran progresivamente la caza y la pesca de subsistencia para ser capaz de comprar televisores y alimentos congelados. El steak de narval pasará al folklor de los días de celebración. La pesca se volverá una exclusividad turística. Después de décadas de mera supervivencia, la mayoría de los Inuit aspira a un poco de comodidad, de facilidad, y a poder sacar la carne del congelador después de haberla “cazada” en el supermercado.

Después de Pond Inlet, a solo 2500 kilómetros de Montreal, saldremos del fiordo para el Mar de Baffin y luego Groenlandia. Tara vuelve lentamente a latitudes mas “sureñas”, la fase septentrional de la expedición Tara Oceans Polar Circle se está quedando atrás.
Vincent Hilaire